Close Menu

    Suscríbete para Actualizaciones

    Recibe las últimas noticias sobre ciencia.

    Lo Más Nuevo

    La pérdida de bosques en 2024 rompe récord

    mayo 22, 2025

    Investigan la consciencia en el laboratorio

    mayo 1, 2025

    “Klara y el Sol”, la IA en una fábula redentora

    abril 24, 2025
    Facebook X (Twitter)
    Los IntangiblesLos Intangibles
    • Contacto
    Facebook X (Twitter) Instagram
    • Inicio
    • Innovación

      Conahcyt, sin indicadores claros y sin 44.5 mdp

      noviembre 5, 2024

      México necesita 6 veces más renovables para 2030

      octubre 3, 2024

      Las accidentadas patentes del próximo Nobel

      septiembre 29, 2022

      El origen conductual del Homo sapiens

      septiembre 16, 2022

      La hazaña de la biotecnología precolombina

      noviembre 22, 2020
    • Salud
    • Mente
    • Creatividad
    • Columnas
    Los IntangiblesLos Intangibles
    Inicio»Mente»La siesta, por mandato de los genes
    Mente

    La siesta, por mandato de los genes

    Manuel Lino GonzálezPor Manuel Lino Gonzálezseptiembre 15, 2022Min de lectura
    Facebook Twitter LinkedIn WhatsApp Email
    La siesta de Vincent van Gogh
    "La siesta", óleo sobre tela que Vincent van Gogh pintó en 1890. CC BY 3.0
    Share
    Facebook Twitter LinkedIn WhatsApp Email

    Dormir la siesta pareciera ser una cuestión de preferencias individuales, de mera costumbre o condicionamiento cultural, además de un hábito saludable; sin embargo, estudios recientes han encontrado que no es lo primero y que, en ocasiones, dormir en la tarde es hasta pernicioso.

    Se sabe, desde hace tiempo, que dormir la siesta tiene un componente genético hereditario, pero ahora, en el estudio más grande que se ha realizado hasta la fecha sobre el tema cuyo reporte se publicó en la revista Nature Communications, se detectaron 123 “regiones genéticas” que influyen en el hábito de dormir la siesta, además de evidencia preliminar que lo vincula con la salud cardiometabólica.

    Además , el estilo de vida y los sucesos del día son determinantes: hay quienes duermen un rato por la tarde para compensar el sueño de mala calidad de la noche anterior, porque despiertan muy temprano en la mañana y necesitan recuperar sueño o porque han hecho mucho ejercicio.

    Sin embargo, “la siesta es controvertida”, dice Hassan Saeed Dashti, del Massachusetts General Hospital y coautor del informe, y explica que hay lugares, por ejemplo en España, donde las siestas han sido parte de la cultura pero últimamente empiezan a no ser bien vistas; por otro lado, algunas empresas en Estados Unidos ahora promueven breves lapsos de sueño como una forma de impulsar la productividad.

    El informe siesta

    Con datos de genética y biométricos de 452,633 personas, del Biobanco del Reino Unido, el equipo identificó las 123 regiones en el genoma humano que de alguna forma están asociadas al hábito de dormir durante el día, la duración del sueño, el insomnio y la tendencia a madrugar o ser noctámbulo.  Además, replicaron de forma independiente sus hallazgos a partir de los genomas de 541,333 personas recolectados por la compañía de análisis genético 23andMe.

    “Esto nos dice que las siestas durante el día son impulsadas biológicamente y no son solo una elección ambiental o de comportamiento”, dice Dashti.

    Pero, tener una base biológica no significa que un hábito sea necesariamente bueno o saludable. Mientras no parece haber problemas fuera de lo común en la porción de la población que informó que “algunas veces duermen siestas” (el 38.2%), se encontraron datos preocupantes en el 5.3% que dijo hacerlo siempre:

    En general se trataba adultos mayores, varones, que reportaron dormir más tiempo a lo largo de las 24 horas del día que el resto de los participantes; tenían un índice de masa corporal mayor, la presión sanguínea elevada, diagnósticos de apnea del sueño; además, reportaron ser fumadores activos, tenían un mayor grado de privación socioeconómica y estaban desempleados, jubilados o eran trabajadores por turnos.

    La naturaleza observacional del estudio no permite tener claridad sobre si dormir siempre la siesta está ocasionando estos malestares o es consecuencia de los mismos; sin embargo, hay otras pistas para aclarar este punto.

    El exceso nunca es bueno

    Un meta estudio realizado en China, que analizó la evidencia disponible en más de 20 estudios con más de 300 mil participantes en total, las siestas de más de una hora pueden ser riesgosas para la salud cardiometabólica, con efectos sobre el aumento de la presión arterial y la circunferencia de la cintura.

    El análisis, publicado en la revista Sleep Medicine, encontró que las siestas de más de 60 minutos se asociaron con un 30% más de riesgo de muerte por cualquier causa y un 34% más de probabilidad de enfermedad cardiovascular en comparación con quienes sólo duermen por la noche. La relación con ek riesgo elevado de muerte se cumplía sólo para quienes, además, dormían más de seis horas por noche.

    De manera consecuente, las siestas de menos de 60 minutos no se asociaron con el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular.

    “Los resultados sugieren que las siestas más cortas (especialmente las de menos de 30 a 45 minutos) podrían mejorar la salud del corazón en las personas que duermen lo suficiente por la noche”, dijo Zhe Pan, de la Universidad Médica de Guangzhou y autor líder del estudio, en el congreso de la Sociedad Europea de Cardiología.

    Las razones de estas afectaciones aún son inciertas, pero estos los estudios sugieren que las siestas prolongadas están relacionadas con niveles más altos de inflamación, lo cual es riesgoso para la salud del corazón y la longevidad, presión arterial alta, diabetes y mala salud física en general.

    Siesta y claridad mental

    En aparente contradicción con los resultados anteriores, un estudio publicado en la revista General Psychiatry, encontró que dormir la siesta de manera regular por la tarde está relacionado con una mejora en la agilidad mental.

    Los autores de este estudio, del departamento de psiquiatría geriátrica del Centro de Salud Mental de Shanghai, se enfocaron en el hecho de que, a medida que las personas envejecen, sus patrones de sueño cambian y dormir un rato en la tarde se vuelven más frecuente, por lo que siguieron a 2,214 personas aparentemente sanas de al menos 60 años y residentes en varias ciudades grandes de China.

    Para el estudio, las siestas se definieron como períodos de al menos cinco minutos consecutivos de sueño, pero no más de dos horas, y se tomaron después del almuerzo; hubo un grupo control que no tomó siestas. Además, se monitoreó el estado de salud general y se midieron 30 aspectos distintos de la capacidad cognitiva de los participantes, incluyendo una evaluación para detectar inicios de demencia. 

    Se encontró que el rendimiento cognitivo fue significativamente más alto entre quienes dormían un rato por la tarde que entre los que no dormían, en general hubo mejoras significativas en la conciencia de ubicación, la fluidez verbal y la memoria, y menos propensión a desarrollar demencia. 

    En resumen

    “Si desea tomar una siesta, nuestro estudio indica que es más seguro mantenerla por debajo de una hora. Para aquellos de nosotros que no tenemos el hábito de dormir durante el día, no hay evidencia convincente para comenzar”: Zhe Pan.

    Además, conviene recordar que con la edad los hábitos de sueño cambian.

    Manuel Lino González

    Posts Relacionados

    Investigan la consciencia en el laboratorio

    mayo 1, 2025

    13 mujeres mueren cada día por cáncer cervical en México

    noviembre 19, 2024

    México, primer lugar en consumo de bebidas azucaradas

    noviembre 14, 2024
    No Te Pierdas...
    Salud

    ATR: la falsa epidemia de los niños mexicanos

    Por Las Invaluablesenero 7, 2019Min de lectura243 visto

    La mayoría de los niños con diagnóstico de Acidosis Tubular Renal están recibiendo un tratamiento…

    Ejercicio podría prevenir 500 millones de enfermos: OMS

    octubre 19, 2022

    Proteger sí rinde: 5 años de las islas Revillagigedo

    junio 1, 2023

    La diabetes ya no es una sentencia definitiva

    noviembre 14, 2018
    Síguenos
    • Facebook
    • Twitter
    Our Picks

    La pérdida de bosques en 2024 rompe récord

    mayo 22, 2025

    Investigan la consciencia en el laboratorio

    mayo 1, 2025

    “Klara y el Sol”, la IA en una fábula redentora

    abril 24, 2025

    Las precoces bacterias que sobrevivieron al oxígeno

    abril 10, 2025

    Mantente Actualizado

    Recibe las últimas noticias sobre ciencia.

    Demo
    Sobre Los Intangibles
    Sobre Los Intangibles

    Tu fuente de información precisa y actualizada sobre el mundo de la ciencia.

    Nuestra Selección

    ATR: la falsa epidemia de los niños mexicanos

    enero 7, 2019

    Ejercicio podría prevenir 500 millones de enfermos: OMS

    octubre 19, 2022

    Proteger sí rinde: 5 años de las islas Revillagigedo

    junio 1, 2023
    Facebook X (Twitter) Instagram
    • Contacto
    • Aviso de Privacidad
    © 2025 Los Intangibles. Soportado por Agencia Digital.

    Teclea tu búsqueda y presiona Enter para buscar. Presiona Esc para cancelar.