De acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación, Conahcyt carecía de indicadores claros para seleccionar proyectos y evaluar resultados
Al borde de convertirse en Secretaría, el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnología (Conahcyt) es señalado por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) por deficiencias en sus procesos de selección de proyectos, falta de revisiones financieras y de indicadores para evaluar resultados, además de 44.5 millones de pesos pendientes por aclarar en un área particular.
En la segunda entrega de la revisión de la Cuenta Pública 2023, publicada la semana pasada, la Auditoría analizó el 82.2% de los 165 millones de pesos que usó el Consejo para el desarrollo de proyectos en materia de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC), como parte de sus programas nacionales estratégicos.
La revisión encontró que “(e)l Conahcyt no garantizó que la selección de propuestas se realizara con base en criterios objetivos e imparciales”, y que “no se proporcionó evidencia de la ejecución las revisiones financieras de las propuestas por parte de la secretaría administrativa”; además no establece “el contenido mínimo de los reportes y entregables”, de acuerdo con el informe simplificado de la ASF.
En particular la revisión destaca el convenio de asignación de recursos número 322506, con el Centro de Investigación e Innovación en Tecnologías de la Información (Infotec), el cual no acreditó el trabajo de 94 de los 97 trabajadores que contrató para hacer la etapa 2 del proyecto encomendado por Conahcyt y a los cuales realizó pagos por 44.5 millones de pesos “con recursos ministrados por el Consejo”.
Infotec es uno de los centros públicos de investigación que coordina Conahcyt (como se conoce al Consejo después de mayo de 2023, cuando entró en vigor la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, que ha sido impugnada), y fue el principal contratista de la administración anterior en cuestiones de tecnologías de información y comunicación.
Fallas de origen de Conahcyt
La ASF también fiscalizó el desempeño del Centro de Tecnología Avanzada A.C. (Ciateq), otro de los centros públicos de investigación que dependen de Conacyt, en sus actividades de investigación y el desarrollo de proyectos tecnológicos y servicios especializados, así como la gobernanza del Centro y la coordinación con Conahcyt.
Como primer punto de sus resultados, la ASF señala que en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 “no se establecieron objetivos, líneas de acción, ni indicadores relacionados con la promoción de la investigación científica y tecnológica”.
Agrega que en los planes del entonces Conacyt (el Programa Institucional 2020-2024 y el Programa Especial de Ciencia, Tecnología e Innovación 2021-2024), “no se definieron indicadores para evaluar las estrategias ni las acciones puntuales” que llevaría a cabo el Consejo.
La ASF señala además que el Programa Institucional 2022-2024 del Ciateq se centró en los temas de salud, agua y energía. “Sin embargo, estos objetivos prioritarios e indicadores no consideraron las áreas de experticia del Ciateq como manufactura avanzada, alimentos, medio ambiente, movilidad, hidrocarburos, así como los temas de posgrados y educación continua”.
Así, “dicho programa no fue suficiente para dirigir ni evaluar la totalidad de las actividades que (el Centro) lleva a cabo y sus efectos en la solución de problemas nacionales, regionales y locales del país; además, no dispuso de indicadores y proyecciones financieras y de inversión”, se lee en el informe.
El INAOE, bien en generar capital humano
En el informe de la ASF también se incluyen los resultados de la fiscalización del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), otro de los centros públicos de investigación, el cual fue evaluado en su compromiso de impulsar “la formación de capital humano altamente calificado para contribuir a articular y fortalecer las capacidades científicas, humanísticas y tecnológicas del país”.
La ASF determinó ocho resultados, en cuatro de los cuales no se detectaron irregularidades; en los que sí, éstas eran de seguimiento de los proyectos y tres fueron solventados por el INAOE antes de la emisión de este Informe. La irregularidad restante generó dos recomendaciones: ambas para mejorar la documentación y el seguimiento de los alumnos.